Sus canciones, a menudo con unas letras oníricas y surrealistas difícilmente interpretables, contaban con todo tipo de referencias a bebés, pájaros y cuerpos celestiales, todo ello bajo la apariencia del rock alternativo, lo-fi, folk y bluegrass.
El título hace referencia al hospital donde Mark Linkous estuvo internado durante meses por su primer intento de suicidio, el hospital St Mary de Londres. La canción está incluida dentro de su disco "Good Morning Spider" (1998).
Arrópame, dulce enfermera
y no dejes que me incendie
Debo volver al bosque, queridas chicas
Debo volver al bosque...
En el ascensor sangriento
subiendo con la primera taza de té de la mañana
¿Cuándo se volvió espacio el cielo,
y el aire en viento?
Las únicas cosas que en verdad necesito
son agua, una pistola y conejitos
Déjame descansar mi acalorada mejilla
sobre tu dulce y cálido vientre
El ascensor sangriento se dirige ahora
al teatro brillante
Vamos, muchachos
por favor, dejadme probar la suciedad limpiada
de mis pulmones
y el musgo de mi espalda
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